Mis amigos siguen jugando a los bolos
me buscan y no me encuentran.
Comienza a divertirme esta escena.
Beben vino y me guardan un vaso toda la noche.
Pero yo salto por otros sitios
con olor a fantasma,
con cara de águila,
sorteando calles,
entrando en galerías saliendo de ellas, huyendo
de la ciénaga.
lunes, 11 de marzo de 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario